Las dunas cantarinas

Las dunas cantarinas

Por Benny Tecuento

En un lugar donde el sol pintaba el cielo de oro y la arena era suave como terciopelo, vivía Mili, una pequeña coneja de orejas largas y ojos brillantes.

Cuando la luna iluminaba el desierto, Mili salía a jugar entre las dunas, deslizándose por sus suaves pendientes y escuchando el misterioso canto del viento. Una noche, siguiendo el sonido de una flauta mágica, Mili se adentró en un lugar secreto de las dunas.

Allí, la arena parecía brillar con una luz suave, y el viento susurraba historias antiguas. Acucurcada entre las dunas, escuchó el viento susurrar: Mili, cierra los ojos y sueña.

Y Mili soñó. Soñó con un jardín secreto donde las flores eran tan brillantes como las estrellas y las mariposas bailaban al ritmo del viento.

Soñó con cascadas de agua cristalina que caían en pequeñas lagunas, donde nadaban peces de colores. Y soñó con volar sobre las nubes, acariciando copos de algodón y viendo el mundo desde arriba.

Pero el sueño más hermoso de todos fue cuando descubrió una cueva escondida entre las dunas. Dentro, brillaba una piedra mágica que cambiaba de color con cada suspiro del viento.

La piedra le susurró un secreto: las dunas guardaban los recuerdos de todos los animales que habían vivido allí. Y así, Mili se quedó dormida, acurrucada entre la suave arena. Con cada respiración, sentía la calma del desierto.

En sus sueños, seguía explorando las dunas, descubriendo nuevos secretos y haciendo nuevos amigos. Y cada vez que se despertaba, sentía la felicidad de saber que el mundo de las dunas siempre la esperaría.

-Fin-

Leer más cuentos de conejos, de otros animales o todo tipo de cuentos infantiles.